Yo soy el buen Pastor, que da la vida por nosotros. Y no tiene miedo al compromiso, y nos pone el ejemplo del asalariado, que son los que aman el beneficio más que el oficio, y sólo piensan en términos de lo que pueden lograr, por eso, cuando llega el peligro, huyen y dejan el rebaño desprotegido. Hay que pedirle al Señor en este domingo que nos de el don de no tener miedo a comprometernos por Él y el Evangelio.
Y eso significa no tener miedo, tampoco al lobo que ataca las ovejas, porque su táctica es la refugiarnos en nuestras comodidades, nuestras mediocridades, porqueno se pueden cambiar las cosas,… Y eso nos desanima y nos desalienta.
Y como podemos descubrir a Cristo como Buen Pastor y no tener miedo a darnos: «Escuchando su voz» Discernir su voz en medio de tanto ruido y tantas propuestas de felicidad, en medio de tantos encantadores que esclavizan, buscar lo que Dios quiere, buscar su voluntad, buscar agradarle, vivir a la escucha, acogiendo su Palabra, dejarnos interrogar por ella, acomodando nuestra vida a los planes de Dios, conforme a su querer, descubrir lo que Dios quiere. ASí seremos un sólo rebaño con un solo Pastor, Cristo.